
Continuar con la lactancia y volver al trabajo remunerado se convierte en una de las principales preocupaciones de las mamás lactantes que quieren o tienen que reincorporarse al trabajo pero que no desean destetar ni dejar de amamantar a su bebé.
Pero, tranquila. Déjame decirte que es posible encontrar formas de mantener la lactancia aunque te reincorpores a trabajar.
En este artículo, te voy a explicar como conseguirlo de forma exitosa y fácil.
La organización y la planificación son muy importantes para garantizar tu tranquilidad y sobre todo, que estás preparada y dispones de toda la información y de todo lo que necesitas para conseguirlo.
Así que voy a empezar hablándote de lo básico:
En definitiva, prepara todo lo que necesitas para luego no agobiarte y poder centrarte en lo realmente importante, tu bebé.
Tu día a día como mamá lactante ahora va a tener sumado un handicap y es que, vas a estar separada de tu bebé unas horas.
¿Significa esto que la lactancia va a terminar?
No, por supuesto que no. La lactancia va a cambiar pero puedes estar complemente segura y tranquila de que tu bebé te va a estar esperando con los brazos abiertos.
Es importante que la persona que se quede al cuidado del bebé sepa como preparar la leche, de que forma ofrecérsela para interferir lo mínimo posible en la lactancia y que además, sepa acompañar a tu bebé a nivel emocional en estos momentos.
Escribiendo este artículo me acuerdo de mi hace 8 años.
Me recuerdo en el baño de unas oficinas pegadas a una nave industrial.
Hablé con mi jefe y le dije que ese baño era mío, que entendía que no me iban a habilitar una sala para mi pero que ese baño me lo quedaba. Yo lo limpié, desinfecté, me llevé una silla para no tener que sentarme en el baño y así transcurrieron mis almuerzos y comidas durante 7 meses.
No nos lo ponen fácil. Por mi cabeza pasaron una y mil veces frases que cuestionaban eso que estaba haciendo y la respuesta siempre era la misma: vale la pena.
Vale la pena porque luego, al volver a casa, la cara de tu bebé al verte, hace que olvides todo.
Y para terminar quiero que sepas algo. Las decisiones las tomas tú pero si que es importante que sean decisiones conscientes.
Por eso, te invito a que te informes, te formes, te prepares emocionalmente y todo lo que necesites para conseguir la lactancia que tu quieras.
¡La lactancia de tu cabeza es posible!
Ya has leído un poco sobre mi experiencia personal y pensando en mi y en lo que me hubiera gustado saber en aquel momento, he preparado un taller online al que ya puedes acceder en el que, además de toda la información, vas a tener mi acompañamiento incondicional. ¡Estoy encantada de poder acompañarte en este proceso!
Puedes escribirme pinchando aquí
Un abrazo enorme