
Dar consejos sobre lactancia materna para mamás primerizas es muy complicado ya que, cada mujer es única y cada lactancia es única.
Yo puedo afirmar que, la lactancia materna es un regalo para toda la vida y es que, amamantar a una criatura desde recién nacido, es una de las mayores experiencias que nos puede ofrecer la naturaleza como mamíferas.
Pero, como en todo, la lactancia viene acompañada de muchas emociones y sentimientos. Y además, cuando nos tenemos que enfrentar a la lactancia, nos encontramos en uno de los momentos más importantes de nuestra vida. Nos acabamos de convertir en mamás.
Y es que justo después del parto viene el postparto y para nosotras, como mujeres, es un momento en el que nos solemos sentir muy vulnerables. Estamos cansadas, no descansamos bien, a nivel hormona sufrimos muchos cambios y encima, hay muchos factores externos que nos afectan y alteran.
Y con respecto a la lactancia materna, desde el primer momento, es importante que dispongamos de nuestro espacio para que se establezca de forma correcta y así, poder conseguir la lactancia que nosotras y nuestra criatura deseemos.
Por eso, como asesora de lactancia y mamá lactante durante casi 6 años, quiero aportar mi granito de arena y acompañarte con estos consejos.
Espera, antes de que los leas quiero decirte algo: ¡Lo estás haciendo muy bien!
No lo dudes en ningún momento y si alguien te hace dudar de hecho, puedes estar tranquila, que el problema no es tuyo.
Algunos consejos que te pueden ayudar en tu día a día asociados a la lactancia materna son:
Los primeros días, es más, las primeras horas, es más, los primeros minutos, son cruciales para que la lactancia materna sea exitosa desde el primer momento.
El primer agarre, que debe producirse en el lugar del parto, marca un antes y un después en la lactancia pero como todo, si en ese momento, por la razón que sea, el agarre no es el correcto, se puede reconducir.
Por eso, los primeros días, deberían ser para que el bebé y su familia se conozcan. Habrá toda una vida para las visitas y para las presentaciones oficiales.
Además, hay mamás que sienten pudor a la hora de enseñar el pecho en público y la calidez de su hogar, de su casa, les aportará la seguridad y la tranquilidad necesaria para conseguirlo.
La lactancia materna es a demanda desde el primer momento. Es decir, las tomas no se regulan ni en tiempo ni en distancia.
Y sí, habrá días en los que los bebés estarán todo el día enganchados al pecho y es totalmente normal.
Piensa que tu criatura, ha pasado de estar nueve meses en tu interior, protegida, calentita, ajena a todo y ahora, esta fuera. ¡Te necesita!
Te necesita a ti. A nadie más. De hecho, en muchas ocasiones, cuando me preguntan sobre las cosas físicas que necesita un recién nacido, mi respuesta es bien sencilla: pañales, ropa y poco más.
Tú eres lo que más necesita.
Nos cuesta asumir que nuestra vida ha cambiado. Te quiero hablar de sentimientos contándote una historia de mi primer hijo y mi primera lactancia.
Alejandro nació en el 2014 y hasta tres semanas antes de dar a luz, yo trabajaba en una multinacional, viajaba casi de lunes a jueves, estaba acostumbrada a trabajar a cualquier hora en cualquier momento y de repente, nació mi bebé y dije: “no quiero nada de esto”
Lo único que quiero es poder cuidar y estar con mi hijo. Pero me costó mucho validar esos sentimientos y de hecho, me reincorporé a trabajar pero por suerte, tuve la oportunidad de reinventarme profesionalmente y así conciliar mi vida laboral con la posibilidad de estar con mis hijos.
Y, ¿Sabes cual fue el motivo por el que me costó tanto validar estos sentimientos? Porque me comparaba. Veía a algunas compañeras de trabajo que se reincorporaban y que eran felices y fui consciente de que todo estaba bien cuando valide mis sentimientos y acepté que esa era la maternidad que ellas querían vivir, no la mía.
Asumir que tenemos derecho a quejarnos, a tener pataletas, a estar tristes, a sentirnos mal,… Nos permite avanzar porque nos permite ser conscientes de nuestra realidad.
¿Van a haber días malos? ¡Pues claro, igual que los había antes!
Te acabas de iniciar en una nueva etapa de tu vida, una nueva etapa como madre.
Si hay algo que se asocia a la maternidad, son las dudas. La maternidad, como la vida, es así. Cuando ya tienes controlada una fase, empieza otra.
Pero lo que es importante es rodearnos y acompañarnos de profesionales que nos resuelvan las dudas desde un punto de vista técnico y que sea acorde a nuestros principios de crianza.
Los grupos de Facebook están genial para preguntar donde ir a pasar el fin de semana pero no para resolver cuestiones que pueden afectar a la salud de tu bebé en la que se llegan a recomendar medicamentos o remedios mágicos.
Y os quiero contestar una pregunta que me soléis hacer de forma recurrente en las asesorías. ¿Qué sucede si mi pediatra no es prolactancia? ¡Tú tienes la respuesta!
Como os decía, los primeros días son fundamentales para el correcto establecimiento de la lactancia. Por eso, el rol de la pareja y de la familia tiene que ser un rol que acompañe y que ayude pero que nunca intente sustituir a la madre.
Las típicas frases de: “Déjame al bebé y así tu haces las cosas“, “Yo te lo cojo mientras pone la lavadora“,.. tendrían que ser al revés. Las visitas, los familiares deben encargarse de la logística de la casa para que tú, dispongas de un espacio acogedor y confortable en el que poder conocerte y enamorarte, aún más si cabe, de tu bebé.
Es importante que te sientes a respirar, que lo hagas con tu pareja, que lo hagas en un momento en el que estéis tranquilos y relajados.
Aprovechad ese rato para hablar de lo que queréis como padres, de cómo queréis llevar a cabo vuestra crianza, de cuales van a ser vuestros principios para criarlo. Hacedlo desde el amor, desde la empatía, desde el conocimiento de que seguramente, no estaréis de acuerdo en todo pero lo que es seguro es que en una cosa sí que lo estáis: queréis a vuestro bebé por encima de todas las cosas.
Empodérate como madre, como mujer. Lucha por conseguir la maternidad feminista que no han llevado a cabo nuestras madres y abuelas.
Piensa en como quieres ser recordada como madre y defiende a capa y espada tus sueños como madre y como mujer.
No lo olvides, ¡Ser mujer es tu superpoder!
Espero que estos consejos sobre lactancia para mamás primerizas te ayuden a conseguir la lactancia que tu quieras.
Algo que me inspira a trabajar en este proyecto y en esta web ha sido descubrir el gran impacto que tienen nuestras palabras, nuestros hechos y nuestra esencia en nuestros hijos y como pueden afectar a su felicidad.
Ser consciente de que, lo que yo haga ahora definirá, en gran medida, a mis hijos como adultos, me ha hecho reflexionar mucho sobre nuestro papel en la sociedad como padres.
Por eso, quiero preguntarte lo siguiente: ¿Quieres ser una madre consciente que deje huella?
Si la respuesta es sí, he preparado un proyecto muy chulo y me gustaría que estuvieras dentro.
¡Pincha aquí para conocer de primera mano de lo que te hablo!